martes, 30 de octubre de 2012

En el Ring

La vida a veces se convierte en un improvisado Ring simbólico donde muchas veces nos sentimos contra las cuerdas, sin fuerzas, agotad@s, con ganas de tirar la toalla, sin  ganas de seguir....

Pero recuerda que caer esta permitido, pero levantarse es obligatorio, por mas fuerte que te golpeen, mantén la guardia, resiste, cúbrete con el manto de la paciencia, la esperanza, la ilusión por saber que el momento es temporal y que todo volverá forzosamente a la normalidad y que de un momento a otro, siempre y... cuando crees que ya no puedes mas, suena una campana de salvación a la que agarrarnos y que nos da un respiro.
Aprovecha ese pequeño instante, ese sonido donde solo había silencio para ver tus puntos débiles y fortalecerlos, aprende a escapar del rincón que te golpea y te lastima, aprende de cada caída anterior, de cada golpe recibido para hacerte mas fuerte. Atrévete a improvisar, a cambiar aptitudes, a rodearte  de personas que te quieren y están dispuestas a decirte donde fallas y que te apoyan y ayudan a levantarte por mas que caigas....

Mantente siempre alerta, ponte metas y mira hacia donde quieres llegar y lo que quieres conseguir, y es en ese preciso instante cuando... por mas que estés contra las cuerdas y sin ver la salida, coges fuerzas de donde creías que ya no había y eres tu quien golpea a la vida con fuerza, demostrando que puedes, que es posible, que puedes triunfar a pesar de las dificultades, que as aprendido de cada golpe, de cada paso, de cada combate.

Se tu mism@, aprende a bailar bajo la lluvia, decide donde quieres llegar y empieza a caminar, tienes que creer en ti mism@ y saber que para ver el arco-iris siempre es necesario un poco de lluvia primero, resiste y recuerda que toda mala racha tiene su fin, cree en ti, aprende a perdonar pues vivirás mas feliz y quiere cada día como si fuera el ultimo, solo de esta manera y pase lo que pase, habrás ganado el combate¡¡




                         

viernes, 27 de julio de 2012

No te detengas


Mientras estés viv@… siéntete viv@
Siempre ten presente que la piel se arruga,
el pelo se vuelve blanco,
los días se convierten en años…

Pero lo importante no cambia,
tu fuerza y tu convicción no tienen edad.

Tu espíritu es el plumero de cualquier telaraña.
Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida.
Detrás de cada logro, hay otro desafío.

Mientras estés viv@, siéntete viv@.
Si extrañas lo que hacías, vuelve a hacerlo.
No vivas de fotos amarillas…

Sigue aunque todos esperen que abandones.
No dejes que se oxide el hierro que hay en ti.
Haz que en vez de lástima, te tengan respeto.

Cuando por los años no puedas correr, trota.
Cuando no puedas trotar, camina.
Cuando no puedas caminar, usa el bastón…

¡Pero nunca te detengas!

sábado, 23 de junio de 2012

Tic Tac

Hace mucho tiempo escuche una frase que me quedo grabada: El tiempo es como el dinero: Ayer es un cheque cancelado, mañana es un pagaré...hoy es dinero en efectivo: Usalo.

Que gran verdad, el tiempo, ese bien escaso....que todos queremos esprimir al maximo, prolongar, detener o incluso en algunos momentos desear que pase. Podemos hacer muchas cosas en la vida, pero jugar con el tiempo no, los errores del pasado no se pueden borrar, pero si enmarcarlos en nuestra mente para no volver a repetirlos, podemos desear algo en un futuro cercano, pero no hacer que llegue antes, y esque si nos pasamos la vida mirando con un ojo al pasado y con otro al futuro el resultado será simplemente que nos quedaremos vizcos¡¡¡¡

Mantegamos la vista puesta en el presente, pues no sabemos que pasara mañana, ni siquiera esta noche, o tan solo dentro de una hora.....asique valora lo que te rodea, siempre hay razones para sonreir, no esperes a decir un: Te quiero, te necesito, te añoro...pues Tic Tac ,Tic Tac, el tiempo pasa y en el paseo de la vida es mejor ir acompañado de un corazon cargado lleno de amor, de musica, de melodia, aprovecha cada segundo, sonrie hasta que no puedas mas, quiere hasta que tu pecho duela, ama sin limites, crea, construye...aunque te caigas, es parte del proceso, levantate: VIVE

No perdamos mas tiempo lamentandonos, pues el mejor director de cine del mundo es el TIEMPO, pues es el quien pone el final perfecto a la pelicula de nuestras vidas. Si, nos pasamos la vida esperando que pase algo importante, cuando realmente ya ha pasado...eres el actor o la protagonista principal de la pelicula de tu vida, todo depende de ti, aqui no hay dobles para los malos momentos, tampoco tomas falsas para borrar tus errores, pero si ese poder de cambiar las cosas, hacerlas mejores y hacer de tu pelicula algo apasionante para los que te rodean.

Tic tac, Tic Tac.....mientras lees pasa el tiempo, tic tac, no esperes mas, utiliza tu tiempo hoy, ahora, de la mejor manera posible, yo hoy ya me siento afortunado, pues parte del mio a sido por un momento tambien tuyo y eso me hace Feliz, Gracias¡¡¡

Espero que seais muy felices y qeu cada segundo de vuestra vida sea mejor que el anterior¡¡

lunes, 12 de marzo de 2012

Se Feliz

 Puedes tener defectos, vivir ansioso y estar irritado algunas veces, pero no te olvides de que tu vida es la mayor empresa del mundo.

Solo tu puedes evitar que ella vaya en decadencia.

Hay muchas personas que te precisan, admiran y te quieren.

Me gustaria que siempre recordaras que ser feliz no es tener un cielo sin tempestades, caminos sin accidentes, trabajos sin cansancio, relaciones sin decepciones.

Ser feliz es encontrar fuerza en el perdón, esperanza en las batallas, seguridad en el palco del miedo, amor en los desencuentros.

Ser feliz no es solo valorizar la sonrisa, sino tambien reflexionar sobre la tristeza.

No es apenas conmemorar el suceso, sino aprender lecciones en los fracasos.

No es apenas tener alegría con los aplausos, sino encontrar alegria en el anonimato.

Ser feliz es reconocer que vale la pena vivir la vida, a pesar de todos los desafios, incomprensiones y períodos de crisis.

Ser feliz no es una fatalidad del destino, sino una conquista de quien sabe viajar para adentro de su propio ser.

Ser feliz es dejar de ser víctima de los problemas y volverse un actor de la propia historia.

Es atravezar desiertos fuera de si, mas ser capaz de encontrar un oasis en lo recondito de nuestra alma.

Es agradecer a Dios cada mañana por el milagro de la vida.

Ser feliz es no tener miedo de los propios sentimientos.

Es saber hablar de si mismo.

Es tener coraje para oir un “No”.

Es tener seguridad para recibir una critica, aunque sea injusta.

Es besar a los hijos, mimar a los padres y tener momentos poéticos con los amigos, aunque ellos nos hieran.

Ser feliz es dejar vivir a la criatura libre, alegre y simple que vive dentro de cada uno de nosotros.

Es tener madurez para decir “Me equivoqué”.

Es tener la osadia para decir “Perdóname”.

Es tener sensibilidad para expresar “Te necesito”.

Es tener capacidad de decir “Te amo”.

Que tu vida se vuelva un jardín de oportunidades para ser feliz…

Que en tus primaveras seas amante de la alegria.

Que en tus inviernos seas amigo de la sabiduria.

Y que cuando te equivoques en el camino, comiences todo de nuevo.

Pues asi serás cada vez mas apasionado por la vida.

Y descubrirás que ser feliz no es tener una vida perfecta.

Sino usar las lágrimas para regar la tolerancia.

Usar las perdidas para refinar la paciencia.

Usar las fallas para esculpir la serenidad.

Usar el dolor para lapidar el placer.

Usar los obstáculos para abrir las ventanas de la inteligencia.

Jamás desistas.

Jamás desistas de las personas que amas.

Jamas desistas de ser feliz, pues la vida es un espectáculo imperdible.
                              

                               Y tu… eres un ser humano especial

viernes, 9 de marzo de 2012

¿Zanahoria, huevo o café?

La hija se quejaba con su padre acerca de su vida y de como las cosas le resultaban tan difíciles.
No sabía como hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida.
Estaba cansada de luchar.
Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo.
Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte.
Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo.
En una de las ollas colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café.
Las dejó hervir sin decir palabra.

Su hija esperó impacientemente, preguntándose que estaría haciendo su padre.
A los veinte minutos el padre apagó el fuego.
Sacó las zanahorias y las colocó en un tazón.
Sacó los huevos y los colocó en otro plato.
 Finalmente, coló el café y lo puso en un tercer recipiente.

Mirando a su hija le dijo: “Querida hija, ¿qué ves?”
-”Zanahorias, huevos y café”, fue su respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias.
Ella lo hizo y notó que estaban blandas.
Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera.
Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro.
Luego le pidió que probara el café.
Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.
Humíldemente la hija preguntó: -”¿Qué significa esto, padre?”

El entonces le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: el agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente.

La zanahoria llegó al agua fuerte y dura, pero después de pasar por el agua hirviendo, se había vuelto débil y fácil de deshacer.

El huevo había llegado al agua frágil, su cáscara fina protegía su interior líquido; pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido.

Los granos de café sin embargo, eran únicos; después de estar en el agua hirviendo, habían cambiado al agua.
- “¿Cuál eres tú?”, le preguntó a su hija.
- “Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes?
¿Eres una zanahoria que parece fuerte, pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza?
¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable?.
¿Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, o un despido te has vuelto duro y rígido?
Por fuera te ves igual, pero… ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido?.
¿o eres como un grano de café?
El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor.
Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor tú reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor
mejoren.
Y tú, ¿cuál de los tres eres?”


jueves, 5 de enero de 2012

Los verdaderos bienes no son materiales

Un día un padre y su familia rica llevaron a su joven hijo a una excursión al campo con la tenaz intención de mostrarle la pobreza en la cual viven algunos. La familia pasó un día y una noche en la granja de una familia muy pobre. Al volver de la excursión el padre preguntó al hijo, -¿Qué tal el viaje?-

-¡Muy bien, Papa!-

-¿Has visto la pobreza en la cual viven algunos?- preguntó el padre.

-¡Si!- -¿Y qué es lo que has aprendido?-

Respondió el hijo, - Vi que nosotros tenemos un perro en casa y ellos tienen cuatro. Nosotros tenemos una piscina que llega hasta la mitad del jardín, ellos tienen un riachuelo que no tiene fin. Nosotros tenemos lámparas importadas en el jardín, ellos tienen las estrellas. Nuestro patio llega hasta el jardín, ellos tienen todo el horizonte.-

Cuando el chico cesó de hablar su padre no sabía que decir.

El chico añadió; - ¡Gracias papa por mostrarme lo pobres que somos!-

Es verdad que todo depende según como lo mires. Si tienes amor, amigos, familia, salud, buen humor y una actitud positiva de la vida, ¡tienes todo!

No se puede comprar ninguna de estas cosas. Aunque tengas todas las posesiones materiales imaginables, suministros para el futuro, pero si eres pobre en el espíritu no tienes nada.






Enfrentarse a los problemas

Un gran maestro y un guardián compartían la administración de un monasterio zen. Cierto día el guardián murió, y había que sustituirlo. El gran maestro reunió a todos sus discípulos para escoger a quien tendría ese honor. “Voy a presentarles un problema —dijo—. Aquel que lo resuelva primero será el nuevo guardián del templo”.

Trajo al centro de la sala un banco, puso sobre este un enorme y hermoso florero de porcelana con una hermosa rosa roja y señaló: “Este es el problema”.

Los discípulos contemplaban perplejos lo que veían: los diseños sofisticados y raros de la porcelana, la frescura y elegancia de la flor... ¿Qué representaba aquello? ¿Qué hacer? ¿Cuál era el enigma? Todos estaban paralizados. Después de algunos minutos, un alumno se levantó, miró al maestro y a los demás discípulos, caminó hacia el florero con determinación y lo tiró al suelo.

“Usted es el nuevo guardián —le dijo el gran maestro, y explicó—: Yo fui muy claro, les dije que estaban delante de un problema. No importa qué tan bellos y fascinantes sean, los problemas tienen que ser resueltos. Puede tratarse de un florero de porcelana muy raro, un bello amor que ya no tiene sentido, un camino que debemos abandonar pero que insistimos en recorrer porque nos trae comodidades.

Sólo existe una forma de lidiar con los problemas: atacarlos de frente. En esos momentos no podemos tener piedad, ni dejarnos tentar por el lado fascinante que cualquier conflicto llevan consigo”.

Los problemas tienen un raro efecto sobre la mayoría de nosotros: nos gusta contemplarlos, analizarlos, darles vuelta, comentarlos... Sucede con frecuencia que comparamos nuestros problemas con los de los demás y decimos: 



“Su problema no es nada... ¡espere a que le cuente el mío!” Se ha dado en llamar “parálisis por análisis” a este proceso de contemplación e inacción. Busca la solución!



Si lo imaginas, lo puedes lograr

En una tarde nublada y fría, dos niños patinaban sin preocupación sobre una laguna congelada. De repente el hielo se rompió, y uno de ellos cayó al agua. El otro agarro una piedra y comenzó a golpear el hielo con todas sus fuerzas, hasta que logró quebrarlo y así salvar a su amigo. 


Cuando llegaron los bomberos y vieron lo que había sucedido, se preguntaron: “¿Cómo lo hizo? El hielo está muy grueso, es imposible que haya podido quebrarlo con esa piedra y sus manos tan pequeñas...”

En ese instante apareció un abuelo y, conuna sonrisa, dijo:
—Yo sé cómo lo hizo.
— ¿Cómo? —le preguntaron.
—No había nadie a su alrededor para decirle que no podía hacerlo.

Si lo puedes imaginar, lo puedes lograr. Einstein




El arbol de los problemas

Un carpintero que había contratado para ayudarme a reparar una vieja granja, acaba de finalizar un duro primer día de trabajo. Las cosas no le salieron muy bien, su cortadora eléctrica se dañó y lo hizo perder una hora de trabajo y su antiguo camión se negaba a arrancar.
Ofrecí llevarlo a su casa y mientras íbamos en camino permaneció en silencio.
Una vez que llegamos me invitó a conocer a su familia.

Mientras nos dirigíamos a la puerta, se detuvo brevemente frente a un pequeño árbol, tocando en las puntas de las ramas con ambas manos.

Cuando se abrió la puerta, ocurrió una sorprendente transformación:
Su bronceada cara estaba plena de sonrisas.
Abrazó a sus dos pequeños hijos y le dió un beso a su esposa.
Posteriormente, me acompañó hasta el auto.
Cuando pasamos cerca del árbol sentí curiosidad y le pregunté,
acerca de lo que le había visto hacer un rato antes.

El me contestó: Ese es mi árbol de problemas.
Sé que no puedo evitar tener problemas, pero no pertenecen a la casa, ni a mi esposa, ni a mis hijos.
Así que simplemente los cuelgo en el árbol cada noche cuando llego a casa. Luego en la mañana los recojo otra vez.

-Lo divertido es, dijo sonriendo, que cuando salgo en la mañana a recogerlos, ni remotamente hay tantos como recuerdo haber dejado la noche anterior…






Nunca tires la toalla

La historia dice que este hombre fracasó en los negocios y cayó en bancarrota en 1831. Fue derrotado para la Legislatura de 1832. 
Su prometida murió en 1835. 
Sufrió un colapso nervioso en 1836. 
Fue vencido en las elecciones de 1836 y en las parlamentarias de 1843,1846, 1848 y 1855. 
No tuvo éxito en su aspiración a la Vicepresidencia en 1856, y en 1858 fue derrotado en las elecciones para el Senado. 
Este hombre obstinado fue Abraham Lincoln, elegido presidente de Estados Unidos en 1860. 

La lección es muy sencilla: sólo se fracasa cuando se deja de intentar.

Las 3 cosas a tener en cuenta

HAY TRES COSAS EN LA VIDA QUE NUNCA REGRESAN... EL TIEMPO, LAS PALABRAS Y LAS OPORTUNIDADES.... 

HAY TRES COSAS QUE PUEDEN DESTRUIRTE.... LA MENTIRA, EL ORGULLO Y EL NO PERDONAR.... 

HAY TRES COSAS QUE NUNCA DEBES PERDER... LA ESPERANZA, LA PACIENCIA Y LA HONESTIDAD... 

PERO HAY TRES COSAS DE MAYOR VALOR.... LA FAMILIA, EL AMOR Y LA AMISTAD.

Los defectos ajenos

Cada Persona, según una leyenda antigua, nace en el mundo con dos bolsos suspendidos de su cuello, uno al frente y otro en la espalda. Todo el bolso que lleva al frente está lleno de las faltas y defectos de sus vecinos, y el bolso grande que lleva detrás en la espalda lo lleva lleno de sus propias faltas y defectos. De ahí es que las personas son rápidas para ver las faltas de otros, pero son a menudo cieg@s para ver sus propios defectos.

Antes de ver y juzgar los defectos ajenos, primero veamos y juzguemos nuestros propios defectos.

Apreciemos nuestros logros

Un mosquito se acercó a un león y le dijo:

-- No te temo, y además, no eres más fuerte que yo. Si crees lo contrario, demuéstramelo. ¿ Que arañas con tus garras y muerdes con tus dientes ? ¡ Eso también lo hace una persona defendiéndose de un ladrón ! Yo soy más fuerte que tú, y si quieres, ahora mismo te desafío a combate.

Y haciendo sonar su zumbido, cayó el mosquito sobre el león, picándole repetidamente alrededor de la nariz, donde no tiene pelo.

El león empezó a arañarse con sus propias garras, hasta que renunció al combate. El mosquito victorioso hizo sonar de nuevo su zumbido; y sin darse cuenta, de tanta alegría, fue a enredarse en una tela de araña.

Al tiempo que era devorado por la araña, se lamentaba de que él, que luchaba contra los más poderosos venciéndolos, fuese a perecer a manos de un insignificante animal, la araña.

No importa que tan grandes sean los éxitos en tu vida, cuida siempre que la dicha por haber obtenido uno de ellos, no lo arruine todo. 

La verdadera riqueza

Cuentan que un rey muy rico de la India, tenía fama de ser indiferente a las riquezas materiales y hombre de profunda religiosidad, cosa un tanto inusual para un personaje de su categoría.
Ante esta situación y movido por la curiosidad, un súbdito quiso averiguar el secreto del soberano para no dejarse deslumbrar por el oro, las joyas y los lujos excesivos que caracterizaban a la nobleza de su tiempo.

Inmediatamente después de los saludos que la etiqueta y cortesía exigen, el hombre preguntó: Majestad, ¿cuál es su secreto para cultivar la vida espiritual en medio de tanta riqueza?

El rey le dijo: “Te lo revelaré, si recorres mi palacio para comprender la magnitud de mi riqueza. Pero lleva una vela encendida. Si se apaga, te decapitaré”.

Al término del paseo, el rey le preguntó: “¿Qué piensas de mis riquezas?”

La persona respondió: “No vi nada. Sólo me preocupé de que la llama no se apagara”.

El rey le dijo: “Ese es mi secreto. Estoy tan ocupado tratando de avivar mi llama interior, que no me interesan las riquezas de fuera”





Vivir como las flores

- Maestro, ¿qué debo hacer para no quedarme molesto? Algunas personas hablan demasiado, otras son ignorantes. Algunas son indiferentes. Siento odio por aquellas que son mentirosas y sufro.

- ¡Pues, vive como las flores!, advirtió el maestro.

- Y ¿cómo es vivir como las flores?, preguntó el discípulo.

- Pon atención a esas flores -continuó el maestro, señalando unos lirios
que crecían en el jardín. Ellas nacen en el estiércol, sin embargo son puras y perfumadas. Extraen del abono maloliente todo aquello que les es útil y saludable, pero no permiten que lo agrio de la tierra manche la frescura de sus pétalos.

Es justo angustiarse con las propias culpas, pero no es sabio permitir que los vicios de los demás te incomoden. Los defectos de ellos son de ellos y no tuyos. Y si no son tuyos, no hay motivo para molestarse...
Ejercita entonces, la virtud de rechazar todo el mal que viene desde afuera y perfuma la vida de los demás haciendo el bien.

Ésto, es vivir como las flores.




El peligro de las palabras

Un grupo de ranas viajaba por el bosque, cuando de repente dos de ellas cayeron en un pozo profundo.


Las demás se reunieron alrededor del agujero y, cuando vieron lo hondo que era, le dijeron a las caídas que, para efectos prácticos, debían darse por muertas. Sin embargo, ellas seguían tratando de salir del hoyo con todas sus fuerzas. Las otras les decían que esos esfuerzos serían inútiles.

Finalmente, una de las ranas atendió a lo que las demás decían, se dio por vencida y murió. La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible. La multitud le gritaba que era inútil pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente salió del hoyo.

Las otras le preguntaron: “¿No escuchabas lo que te decíamos?” La ranita les explicó que era sorda, y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.

Tengamos cuidado con lo que decimos, pero sobre todo con lo que escuchamos.




Ignoremos las criticas

El joven discípulo de un filósofo sabio llegó a casa de este y le dijo: 

—Maestro, un amigo suyo estuvo hablando mal de usted. 
—¡Espera! —lo interrumpió el filósofo—. 
¿Ya hiciste pasar por las tres rejas lo que vas a contarme? 
—¿Las tres rejas? —Sí. La primera es la reja de la verdad. ¿Estás seguro de que lo que quieres decirme es absolutamente cierto?
—No; lo oí comentar a unos vecinos.
—Entonces al menos lo habrás hecho pasar por la segunda reja, que es la bondad. Esto que deseas decirme, ¿es bueno para alguien?
—No, en realidad no. Al contrario...
— ¡Vaya! La última reja es la necesidad. ¿Es necesario hacerme saber eso que tanto te inquieta?
—A decir verdad, no.

—Entonces —dijo el sabio sonriendo—, si no es verdadero, ni bueno, ni necesario, sepultémoslo en el olvido.




La Naturaleza Humana


Un maestro oriental, cuando vió como un escorpión se estaba ahogando, decidió sacarlo del agua.
Cuando lo hizo, el alacrán lo picó. Por la reacción al dolor, el maestro lo soltó, y el animal cayó al agua y de nuevo estaba ahogándose.

El maestro intentó sacarlo otra vez, y otra vez el escorpión lo picó.

Alguien que había observado todo, se acercó al maestro y le dijo: "Perdone... ¡pero usted es terco! ¿No entiende que cada vez que intente sacarlo del agua lo picará?".

El maestro respondió: "La naturaleza del escorpión es picar, y eso no va a cambiar la mía, que es ayudar".
Y entonces, ayudándose de una hoja, el maestro sacó al animalito del agua y le salvó la vida.

No cambies tu naturaleza si alguien te hace daño; sólo toma precauciones. Algunos persiguen la felicidad,... otros la crean.





En tiempos de crisis: Imaginacion

Cuenta una antigua leyenda que en la Edad Media un hombre muy virtuoso fue injustamente acusado de asesinato. El culpable era una persona muy influyente del reino, y por eso desde el primer momento se procuró hallar un chivo expiatorio paraencubrirlo.

El hombre fue llevado a juicio y comprendió que tendría escasas oportunidades de escapar a la horca. El juez, aunque también estaba confabulado, se cuidó de mantener todas las apariencias de un juicio justo. Por eso le dijo al acusado: “Conociendo tu fama de hombre justo, voy a dejar tu suerte en manos de Dios: escribiré en dos papeles separados las palabras 'culpable' e 'inocente'. Tú escogerás, y será la Providencia la que decida tu destino”.
Por supuesto, el perverso funcionario había preparado dos papeles con la misma leyenda: “Culpable”.

La víctima, aun sin conocer los detalles, se dio cuenta de que el sistema era una trampa. Cuando el juez lo conminó a toma uno de los papeles, el hombre respiró profundamente y permaneció en silencio unos segundos con los ojos cerrados. Cuando la sala comenzaba ya a impacientarse, abrió los ojos y, con una sonrisa, tomó uno de los papeles, se lo metió a la boca y lo engulló rápidamente. Sorprendidos e indignados, los presentes le reprocharon.
—Pero, ¿qué ha hecho? ¿Ahora cómo diablos vamos a saber el veredicto?
—Es muy sencillo —replicó el hombre—. Es cuestión de leer el papel que queda, y sabremos lo que decía el que me tragué.
Con refunfuños y una bronca muy mal disimulada, debieron liberar al acusado, y jamás volvieron a molestarlo.

“Nunca dejemos de luchar hasta el último momento. En momentos de crisis, sólo la imaginación es más importante que el conocimiento”.
Albert Einstein